La semana pasada no actualice el blog y por ello os pido mil
disculpas. Uno de las reglas que me impuse cuando abrí este blog junto a mi
compañera fue la de actualizar semanalmente aunque se me hubiera inundado la
casa, o me hubiera encontrado a Rajoy por la calle y estuviera en pleno shock,
y cumplí esa promesa hasta la semana pasada. Os contare cual es el suceso que
me ha llevado a tal indisciplina, se llama Confetti.
Hace unos años cree con unas amigas un colectivo artístico
pensando que no solo nos podría ayudar a hacer currículum sino que haría que no
nos oxidáramos mientras conseguíamos trabajar en nuestra profesión. Para todas
no ocurrió el milagro de trabajar-de-lo-mío y el colectivo se quedo en un parón a la
espera de nuevos aires. Pero todo siguió igual durante unos años, para las
empresas no teníamos suficiente experiencia o teníamos "sobre cualificación", no
les encajábamos en su equipo o no era el momento de contratar a nadie. Nunca estábamos
en el momento indicado en el lugar preciso.
Así, hace un mes, revivimos la función del colectivo de
ayudarnos a hacer cosas, para crear nosotras mismas un lugar y un momento
adecuado para nuestra futura forma de vida. Y nació Confetti, como una
pequeña esperanza para aquello que queremos ser en un futuro: trabajadoras
felices.
Confetti es un fanzine infantil en español, este primer
número está totalmente hecho a mano y está impregnado de imprevistos,
equivocaciones y esa ligera sensación de felicidad que nos invade cuando
ponemos empeño y mucha ilusión en algo que nos emociona. Mucho trabajo también,
mucho estrés, y esperemos muchas alegrías futuras.
Seamos valientes, seamos emprendedores y responsables, en
este momento de la historia en que podremos cambiar la sociedad que nos rodea
si no nos conformamos con vislumbrar el mundo tal y como lo hacíamos. Yo quiero trabajar en una empresa
responsable, seria de verdad, donde los beneficios no sirvan para tirar dinero
al aire o para que un hombre pagado de sí mismo se limpie el culo mientras en
la calle duerme gente en cajeros, sino para hacer más cosas, para ser mejores
jefes, para dar más calidad a los trabajadores, para saber que lo hago sirve
para mejorar el mundo aunque sea en un paso muy pequeño.
Y si no existe esa empresa, tenemos que crearla.
Silvia Piquer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Copleanos